EarthTechling Newsletter
por Beth Buczynski
Con cerca de 200.000 restaurantes de comida
rápida que sirve a millones de clientes, América genera una gran cantidad de
aceite de cocina usado. Al igual que el aceite que se acumula en la sartén,
esta grasa puede no sólo ser arrojado por el desagüe lo cual sería una
verdadera lástima. Algunas personas han empezado a utilizarlos como combustible
de sus vehículos, y se ha sugerido que este desagradable subproducto de
alimentos fritos podría ser la clave para una mejor y más barato fuente de bioplásticos.
Según la investigación presentada en la Conferencia
de Otoño de la Sociedad de Microbiología General, en el ano 2012, que el uso de
aceite de cocina usado como materia prima reduce los costos y el tiempo que la
producción de bioplásticos de uso médico.
Los bioplásticos son materiales libres de
petróleo, sintetizados naturalmente por los microbios. Con el fin de producir
grandes cantidades de bioplástico, las bacterias se cultivan en grandes
fermentadores porque la glucosa se utiliza como materia prima. Este proceso es
eficaz, pero muy caro, que limita el uso generalizado de bioplásticos.
Investigadores de la Universidad de
Wolverhampton descubrieron que el uso de aceite de cocina como material de
partida puede ser más eficaz, que haciendo uso de glucosa una sustancia difícil
de residuos.
"Nuestra bacteria productora de
bioplástico, Ralstonia eutropha H16, creció mucho mejor en el aceite de más de
48 horas y por lo tanto produce tres veces más PHB que cuando se cultiva en la
glucosa", Victor Irorere que llevó a cabo la investigación, dijo en un
comunicado de prensa. "Experimentos fijados eléctricamente, realizados en
colaboración con investigadores de la Universidad de Birmingham, mostraron que
las nanofibras del plástico producidos a partir de aceites también fueron menos
cristalina, lo que significa que el plástico es más adecuado para aplicaciones
médicas."
Poli 3-hidroxibutirato, también conocido como
PHB, es el polímero producido más comúnmente en el (PHA) de la familia de
poliésteres polihidroxialcanoato.
Si pueden ampliar el proceso, este avance la
investigación podría ser una buena noticia para aquellos que necesitan
implantes médicos o prótesis. Dado que el uso de aceite de cocina usado reduce
considerablemente el costo de la producción de bioplástico, los ahorros podrían
ser transmitidos a los pacientes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario